¿Qué seguridad y resguardo puede tener un país en el que sus Fuerzas Armadas se dedican a actividades empresariales? Basta ver la situación de Venezuela para encontrar la evidente respuesta.
“Contacte con nosotros y sin compromiso le cotizaremos su servicio”. Así, al estilo de los infocomerciales de Estados Unidos, se ofrece la Empresa Militar de Transporte (Emiltra) a entes públicos y privados, así como a particulares que deseen el traslado de materiales o mercancías en el país o en el exterior, reseño El Nacional.
Emiltra, junto con otras 16 compañías mixtas y firmas anónimas, constituye el emporio industrial, comercial y de servicios que se levanta en la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y que evidencia cómo los militares incursionan en áreas que hasta 2003 eran del dominio civil. El ministro de la Defensa, general en jefe Vladimir Padrino López, lo ha llamado el «Motor Industrial Militar».
“Al ser una empresa militar, se cuenta con el apoyo logístico de las siete Regiones de Defensa Integral (REDI) en las cuales está dividido el país, proporcionando alojamiento a nuestros conductores, así como también lugares seguros para resguardar la carga y el vehículo de ser necesario”, señala la promoción de Emiltra en la página web del Ministerio de la Defensa. La empresa cuenta hasta ahora con 31 clientes, entre ellos Pdvsa, Pdval, BCV, Mercal, Diana y cinco firmas privadas.
Por una cuestión de supervivencia, la “Fanb socialista y chavista” optó por “diversificarse” : fabrica bienes y productos para el consumo interno como balas y chalecos, produce alimentos y carros, vende agua (Agua Tiuna) y hasta importa bombillos en un convenio con China por medio de la empresa Inspur.
Los nuevos “componentes empresariales” están descritos en la Zona Económica Militar (ZEM). Son 8 grupos, que a su vez se subdividen en áreas de trabajo o establecieron alianzas con sectores privados bajo la figura de empresas mixtas. En total son 17.