La escasez es un mal que se ha generalizado en todos los sectores del país, donde el «no hay» se ha vuelto costumbre. La salud no escapa de ello y las vacunas tampoco se consiguen.
El pasado miércoles 28 de septiembre, el hospital Dr. Raúl Leoni, en San Félix, estado Bolívar, se quedó sin vacunas de toxoide diftérica, que según los trabajadores no han llegado más al Distrito Sanitario N° 2 Caroní, reseñó El Pitazo.
Vacunaron durante lunes y martes, pero se agotaron. Las personas ven reducidas sus opciones para vacunarse contra la difteria, enfermedad que reapareció en el estado Bolívar tras 20 años de haberse erradicado en el país.
Un trabajador del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (Ivss) indicó que en Guaiparo solo hay disponibles inyecciones para niños de cero a cinco meses.
El pediátrico Menca de Leoni cerró, el pasado miércoles, las puertas al público por el colapso que representa tener tantos pacientes contagiados con difteria. El área está reservada solo para la enfermedad, altamente contagiosa.
“La cosa está fea. Los doctores están reunidos y mandaron a traer gente de Caracas porque hay muchos casos y otra niña se murió ayer (miércoles)”, dijo una enfermera que salía de guardia.
Médicos han confirmado la muerte de 17 niños por difteria en Bolívar, 12 provenientes de Sifontes y cinco de Caroní. Los fallecimientos ocurren desde abril, sin que las autoridades sanitarias informen nada al respecto.
Con información de El Pitazo.
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