Recientemente, el alcalde opositor del municipio Torres en el estado Lara, Javier Oropeza se vio en la necesidad de salir de Venezuela, luego de haber sufrido una fuerte persecución y el amedrentamiento por parte del régimen madurista, tras las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio.
Notiprensa
Es importante mencionar que a Oropeza y a su equipo de trabajo los acusan, entre otros supuestos delitos, de omisión y los responsabilizan por los diferentes hechos violentos registrados en Carora en los días posteriores a los comicios.
De acuerdo con La Patilla, la «cacería» inició el pasado 29 de julio, luego de que se presentara una situación irregular a las puertas de la sede del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), donde una protesta protagonizada por algunos factores de oposición se tornara violenta.
En medio de este contexto, el alcalde señaló que envió un documento al prefecto del municipio Torres, quien fungía como representante de la Gobernación de Lara en esa jurisdicción, que, por ser un ente municipal, no disponía de organismos de seguridad, así como tampoco tenía competencias sobre los diferentes organismos estatales.
En ese sentido, pasadas las 3:00 pm del 30 de julio, la situación en el PSUV había escalado al punto de que un joven resultó herido y, a los días, falleció en el Hospital Central de Barquisimeto.
Por esto, el ministro de Comunicación e Información, Freddy Ñáñez, lo acusó de «omisión» por un incendio ocurrido en la sede del partido de la tolda roja. Así mismo, la radio comunitaria Venceremos solicitó a la Fiscalía de la República investigar estos hechos.
Contó que una vez que se supo de estas «falsas acusaciones», debió resguardarse.
Redacción Maduradas con información de La Patilla
Lea también: