No hace falta hablar demasiado sobre la crisis penitenciaria de Venezuela porque se sabe que es muy grave. Según fuentes militares, 41 presos huyeron anoche de la Penitenciaria General de Venezuela (PGV) hacia el Centro para Procesados “26 de Julio” que queda al lado.
Ambos establecimientos penitenciarios son vecinos y están situados en San Juan de los Morros, Guárico. Pero la PGV vive una situación irregular desde hace meses por el accionar de los pranes, quienes se niegan a liberar a familiares y reos que mantienen secuestrados.
Foto: Últimas Noticias.
Situación que comenzó porque los pranes “El Ratón” y “Franklin Masacre”, no quieren aceptar el plan de pacificación iniciado por el Ministerio Penitenciario, ya que significaría dejar de recibir semanalmente 23 millones de bolívares, gracias al “impuesto a la vida” o “la causa”, como lo denominan, una cuota que cada preso debe pagar para poder vivir, según testimonios. Y a quienes no pagan, le disparan en las manos, le cortan los pies y lo confinan en un área de castigo.
La ministra Iris Varela dijo a Últimas Noticias que el supuesto plan de pacificación prosigue con un grupo de funcionarios que están “desplegados y atentos”. A la vez que aceptó tener conocimiento de unos disparos que se oyeron la mañana de este viernes dentro de la PGV, sin embargo, comentó no tener conocimiento de personas heridas e insistió en que los llamados “líderes negativos” deban desalojar el penal y liberar a los niños y adultos que se mantienen dentro.
Hasta ahora suman 2.436 los reos que han migrado de la PGV hasta el “26 de Julio” donde son estabilizados a nivel de salud y trasladados a su cárcel de origen. El Saime instaló un equipo enviado desde Caracas para verificar la identidad de cada uno de los rescatados por el Min-Penitenciario.
Con información de Últimas Noticias
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