El martes pasado, Diosdado Cabello, el primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), hizo una aparición en el estado de Lara, lugar que también fue visitado por María Corina Machado, líder de Vente Venezuela.
Miguel ZAMBRANO / AFP
En una ceremonia en honor al natalicio del héroe de la independencia Jacinto Lara, Cabello reafirmó que las elecciones presidenciales programadas para el 28 de julio no serán suspendidas. Además, advirtió sobre supuestos planes de violencia orquestados por la oposición.
Durante su discurso, el oficialista expresó que ciertos sectores de la oposición supuestamente no están interesados en las elecciones, sino en la violencia. Aseguró que estos grupos están listos para repetir su comportamiento habitual en cada elección: alegar fraude simplemente porque no tienen los votos necesarios para ganar.
Cabello insistió en que las dudas sobre la celebración de las elecciones presidenciales provienen del miedo de los opositores a perder y de su preparación para un escenario de violencia después de alegar fraude. Prometió que cualquier intento de violencia será detenido a tiempo.
El primer vicepresidente del PSUV también hizo una serie de advertencias sobre los supuestos planes desestabilizadores de la oposición. Declaró que si países como Estados Unidos y los de la Unión Europea invaden Venezuela a petición de los adversarios políticos, estos serán declarados “enemigos de la patria” de inmediato.
Por último, Cabello pidió al electorado que no permita que el fascismo, al que describió como un agente de la oposición, gane terreno después del 28 de julio. Aseguró que las elecciones se llevarán a cabo en paz, a pesar de las amenazas de violencia.
Después de su discurso, Cabello anunció que aprovecharía su tiempo en Lara para “dar unas vueltas”. Mientras tanto, la ganadora de las primarias de la oposición hará un recorrido por Barquisimeto, en camino a un acto político.
Redacción Maduradas
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