A estas alturas las pruebas sobran. Son miles las personas que bajo coacción tuvieron que retirar sus firmas que ya habían plasmado con la esperanza de iniciar un proceso revocatorio en contra de Nicolás Maduro. Las amenazas mayores las han sufrido los empleados públicos, quienes fueron sometidos a listas públicas en las que se les acusa de «traidores».
La exigencia fue clara: «O borras tu firma o estás botado». Así lo contó Víctor Pulgar, trabajador de Cantv en Acarigua, en una entrevista que ofreció El Pitazo.
Víctor Pulgar contó que además del trabajo recibió presiones de la Universidad Politécnica Territorial de Portuguesa JJ Montilla, donde estudia informática, y donde le dijeron que quienes firmaron saldrían en una lista y que no tendrían derecho a créditos ni becas.