El gobernador del estado Miranda y excandidato presidencial, Henrique Capriles Capriles aseguró recientemente que: “Hay tres secretos bien guardados por este gobierno: la inflación, la fecha de las elecciones parlamentarias y la fortuna de altos funcionarios, presuntamente implicados en narcotráfico y lavado de dinero. El gobierno debería investigar, es grave que se presuma que el país sirve de puente al narcotráfico”.
Al investigar denuncias de corrupción, narcotráfico y lavado de dinero, en las cuales están involucrados altos funcionarios del Estado, los poderes son selectivos y terminan por sancionar a subalternos o se acusa a quienes piden justicia, señaló Transparencia Venezuela.
Transparencia Venezuela concluye que impera la impunidad luego de ver la actuación del Estado y de examinar 15 casos, resultado de investigaciones periodísticas, de los cuales la Fiscalía General procesó 3 y anunció medidas contra los responsables.
“Cuando hay poderosos o gente cercana al poder no se imponen sanciones o, lo más grave, ni siquiera se abre el caso. La Contraloría General, la Asamblea Nacional y la Fiscalía General se niegan a indagar, como pasó con las medicinas vencidas y la leche que terminó en Colombia”, afirmó la coordinadora de Transparencia Venezuela, Mercedes de Freitas.
La Misión Impunidad de esa ONG fue creada con el fin de darle seguimiento, entre otros, a los expedientes sobre 400.000 kilos de medicamentos vencidos entre 2010 y 2014; la empresa Proyectos y Obras Maga, que obtuvo 360 contratos en la gestión de José Vicente Rangel Ávalos en la Alcaldía de Sucre; la “red de Pdvsa” que financió la campaña del PSUV entre 2005 y 2010; la licitación directa del mausoleo de Bolívar al entorno del ex ministro Francisco “Farruco” Sesto, y el tráfico de mineral de hierro en Ferrominera Orinoco. En este último caso, llamado “La mafia de las cabillas”, el principal sospechoso salió en libertad por una medida de sobreseimiento y a otros se les dio casa por cárcel.
“Los poderosos compran jueces y los presionan para no ser castigados. Caen solo los subalternos. Al final aumenta la impunidad y en Venezuela el único que estuvo preso fue ‘el chino de Recadi”, expresó De Freitas.
Félix Seijas Rodríguez, de la encuestadora Delphos, considera que la ciudadanía se muestra apática sobre el asunto de la corrupción por varias razones: “En tiempo de bonanza ese ítem desaparece como problema. Solo cuando la crisis es atribuida a irregularidades ocupa los primeros puestos. La escasez, la inseguridad y el alto costo son las principales. La corrupción está en quinto o sexto lugar y se percibe que es un ‘gen del venezolano’; es decir, cada quien comete un hecho para obtener algo”.
Con información de El Nacional.