El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, defendió la tarde de este lunes 16 de agosto la decisión de retirar las tropas norteamericanas en Afganistán, a pesar de las fuertes consecuencias desencadenadas en Kabul.
NYT
Durante una rueda de prensa, el mandatario afirmó que Estados Unidos no puede pelear una guerra en la que las fuerzas afganas no se encuentran dispuestas a ganar por sí mismas.
«Nuestros soldados no pueden ni deben luchar y morir en una guerra que las fuerzas afganas no están dispuestas a librar por sí mismas”, señaló.
Biden consideró que la retirada militar “es la decisión correcta para los militares que han arriesgado su vida y para Estados Unidos”.
Asimismo, admitió que el avance de los talibanes, quienes tomaron el control de la capital de ese país este domingo 15 de agosto, fue más rápido de lo esperado.
“Esto se desarrolló más rápido de lo que esperábamos. Los líderes de Afganistán huyeron”, indicó.
El gobernante aseguró que la misión de Estados Unidos en Afganistán no tenía como objetivo construir una nación ni combatir a contrainsurgentes, sino que era evitar ataques terroristas.
“Nuestra misión en Afganistán no era construir una nación, ni crear una democracia unida. Nuestro único interés nacional en Afganistán ha sido y sigue siendo prevenir un ataque terrorista en Estados Unidos”, aclaró.
Al mismo tiempo, afirmó que Estados Unidos continuará “apoyando” a la población afgana y promoviendo los derechos humanos “a través de la diplomacia, no con un despliegue militar sin fin”.
Por último, Biden ratificó que seguirá con el plan de evacuación de los ciudadanos norteamericanos y aliados en ese país, y advirtió que, si sufren un ataque, “la respuesta de Estados Unidos será inmediata y devastadora”.
Redacción Maduradas
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