Tras mantener una «histórica» reunión en Buenos Aires con el presidente argentino, Mauricio Macri, el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, defendió que la transición hacia una «Venezuela libre» sea «pacífica y libre» con especial atención a una «crisis humanitaria que se agrava».
«Algunas pequeñas tendencias han querido hacer ver que esto es un problema entre una ideología u otra, entre guerra y paz, en que un país se quiere hacer de los recursos de Venezuela… pero no es así. El dilema hoy en Venezuela es entre dictadura y democracia. Entre pobreza y miseria«, remarcó el político tras su encuentro con Macri.
En una comparecencia acompañado del canciller argentino, Jorge Faurie, Guaidó, que realiza una gira por diversos países latinoamericanos que ya le han reconocido como presidente interino de Venezuela, destacó que comienza una «nueva relación» con Argentina, «basada en principios» y en el respeto a la democracia y los derechos humanos.
«Es histórico este encuentro. Quedan atrás los maletines de dinero, queda atrás lo que destruyó a Venezuela, que es la corrupción, y viene una etapa de florecimiento, de sanas relaciones, de hablar de la agroindustria y recuperar fuentes de empleo», remarcó.
Guaidó llegó a Buenos Aires procedente de Asunción, donde fue recibido por la mañana por el presidente paraguayo, Mario Abdo Benítez, y el sábado hará lo propio con Lenin Moreno en Ecuador.
Según explicó, esta gira busca la integración y el nuevo relacionamiento internacional, marcado por la cumbre del llamado Grupo de Lima en Colombia, celebrada la semana pasada, que brindó «oportunidades importantes».
«Tenemos que construir un gobierno de transición que genere gobernabilidad y estabilidad y atienda la emergencia humanitaria. Y garantice la reinstitucionalización del país», enfatizó.
Guadó calificó de «excelente» la reunión con Macri, quien se mostró, según dijo, «muy preocupado» por la situación.
Faurie señaló que la visita del «presidente de Venezuela» honra a su país y recordó que Macri se comprometió desde el primer día con la democracia y su «recuperación de la libertad».
Si bien el mandatario no compareció ante los medios tras la reunión con Guaidó, celebrada en la residencia presidencial de Olivos, esta mañana sostuvo en un discurso en el Congreso de la Nación por la apertura del año legislativo que «Venezuela está en una profunda crisis política, económica, humanitaria y sanitaria».
«Que solo se resolverá con más democracia y con el apoyo de los países comprometidos con el pueblo venezolano», aseveró, convencido de que Nicolás Maduro no respeta la democracia ni los derechos humanos.
En su breve paso por la capital argentina, Guaidó saludó brevemente a cientos de venezolanos que se apostaron ante el Palacio de San Martín, donde se celebró la rueda de prensa, para darle la bienvenida.
«Lo recibimos con muchísimo cariño y estamos muy orgullosos de que esté visitando todos los países igual que lo hace cualquier presidente apenas lo eligen. (Tenemos) toda la esperanza puesta en él», cuenta a Efe María Graciela Nieves, que lleva tres años establecida en Argentina
Por su parte, César Figueroa junto a su familia expresó la «emoción» por poder ver a su «nuevo presidente».
«Estar en estas tierras donde estamos tan lejos de nuestro país y poder ver a alguien que nos está representando en todo el mundo», agregó.
Guaidó agradeció la hospitalidad de países como Argentina aunque anheló la vuelta a casa de muchos venezolanos que añoran su tierra.
Consultado por los siguiente pasos, Guaidó adelantó que durante la próxima semana volverán a convocarse protestas en las calles.
«No podemos permitir que un régimen que abiertamente viola derechos humanos y que bloquea ayuda humanitaria sienta que es impune», afirmó.
Respecto al apoyo militar, indicó que el 80 % de las fuerzas armadas «están a favor de un cambio», pero acusó a Cuba de injerir y aterrorizar a los militares para que no se «pronuncien abiertamente».
Redacción Maduradas con información de EFE