La Corte del Distrito Sur de Florida, en Estados Unidos, acusó a los venezolanos Jesús Ramón Veroes y Luis Alberto Chacín Haddad por conspiración de lavado de dinero.
Ambos ciudadanos, residenciados en el país norteamericano, habrían sido los responsables de enviar a la estatal eléctrica Corpoelec 500 transformadores que no fueron utilizados porque eran compatibles solo con sistemas eléctricos en Cuba y Nicaragua. Sin embargo, el pedido fue pagado por el Estado Venezolano, tal como reveló el propio Veroes en una reunión de marzo de 2017.
El documento presentado para la acusación muestra que Chacín tenía en su poder cuatro contratos para proporcionar montacargas a Corpoelec: uno por 6.429.000 dólares (25 de mayo de 2016), otro por 9.789.250 dólares (3 de junio de 2016), uno más por 893.713,89 dólares (3 de junio de 2016) y un último entre la compañía eléctrica y un “conspirado”, quien es presidente de una corporación de Florida con sede en Port St.
Esta acusación ocurre después de que Venezuela sufrió el apagón nacional más prolongado de su historia producto del colapso de su sistema eléctrico hace dos semanas.
Redacción Maduradas con información de La Patilla
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