El ex prefecto de la ciudad de Valencia (estado Carabobo) Armando Amengual denunció que, de acuerdo con el testimonio de familiares, muchos de los privados de libertad que fallecieron en la tragedia de la Comandancia General de Policarabobo, no murieron por quemaduras o asfixia, sino que fueron rociados con gasolina y tiroteados.
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En ese sentido, solicitó que el gobernador de la entidad, Rafael Lacava, renunciara a su cargo, pues, a su juicio, es «responsable del hecho».
«El gobernador Lacava debe renunciar a su cargo, porque su carro de Drácula está involucrado en la masacre ocurrida», aseveró a ABC.
En ese sentido, recordó que el conocido «Carro de Drácula» era utilizado para detener a delincuentes que incurrían en crímenes comunes y que, como consecuencia, se copó la capacidad de los recintos temporales de los detenidos que son las sedes policiales y las comandancias.
Recordó que el sistema penitenciario venezolano está en deplorables condiciones.
«No basta con la detención de los cinco funcionarios policiales, incluido el subcomandante José Luis Rodríguez, como asegura el fiscal Tarek William Saab. ¿Y dónde queda la responsabilidad de los agentes del Cicpc que resguardaban los calabozos?», añadió.
Redacción Maduradas con información de ABC
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