Siguen las grandes contradicciones dentro del PSUV (Partido Socialista Unido de Venezuela), a pesar de que sus principales directivos aseguran que es el partido más democrático del país, sus acciones demuestran todo lo contrario.
De cara a la celebración del tercer congreso de esa tolda política fueron elegidos 537 delegados pero solo podrán hablar 40 personas, reportó el diario El Nacional.
“40 de los delegados representan a gobernadores, alcaldes y diputados”, expresó el coordinador de Marea Socialista, Gonzalo Gómez, al consultársele “si el congreso está entubado”. En otras palabras: no harán críticas y se impondrán controles. “Esperamos democratización y apertura en el PSUV. Que ejecute ‘el golpe de timón’ impulsado por Chávez, se radicalice el socialismo y no se concilie con las empresas”, instó Gómez.
Marea Socialista consignó en el PSUV las conclusiones de la Conferencia Nacional de la militancia, pero duda que puedan discutirse: “La composición del Congreso está deslegitimada porque hay delegados que no fueron electos (gobernadores, alcaldes, diputados y ministros), por lo que planteamos convocar una constituyente en el PSUV”, manifestó Gómez, quien negó que formen tienda aparte y alegó que ejercen el derecho de expresarse y de reclamar espacios.