El pasado lunes 23 de enero, la vicepresidenta del régimen, Delcy Rodríguez, informó que la inflación anual de Venezuela en el 2022 fue de 234%, una cifra que el chavismo celebró como parte del proceso de desaceleración del alza de precios. Sin embargo, expertos advierten que en realidad son malas noticias para la economía venezolana.
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En principio, los datos ofrecidos por Rodríguez contrastan con la cifra anunciada por el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), integrado por economistas independientes, que calculó la inflación en 305,7%.
La vocera del régimen, por su parte, dio el anuncio con entusiasmo por el descenso que registró en comparación con el año 2021, cuando la inflación fue de 686%, según el Banco Central de Venezuela (BCV). Entretanto, econosmistas destacan que una inflación de 234% significa que los precios de bienes y servicios se triplicaron en apenas 12 meses.
Aunado a ello, la inflación en Venezuela continúa siendo la más alta de Latinoamérica por un significativo margen y la segunda más alta en todo el mundo, solo después de Zimbabue, cuya alza de precios en 2022 fue de 339,7%.
“A pesar de que es una inflación menor, es una muy mala noticia. Había una proyección de que la inflación podía dar signos de estar cercana a 100%. El brinco inflacionario de agosto, noviembre y diciembre echó por tierra todo esto, pero dejó en evidencia que el plan antiinflacionario del gobierno tiene fallas importantes”, explicó el economista y docente universitario Luis Oliveros para la Voz de América.
El economista y director del Centro de Investigación y Formación Obrera (CIFO), Manuel Sutherland, también puso en duda la precisión de la cifra ofrecida por Rodríguez.
“Lo que se siente en la calle es que los precios aumentaron cuatro veces. La cifra del Observatorio Venezolano de Finanzas es más adecuada», sostuvo.
«Pinta mal» el posible aumento salarial
En cuanto al contexto actual, Oliveros considera que no se observan síntomas de mejoría, a propósito del disparo inflacionario que se observó en noviembre y diciembre, a lo que se suma la posibilidad de un aumento salarial debido a las protestas realizadas por los trabajadores públicos, que buscan presionar a Nicolás Maduro.
“Comenzó muy mal. Ha aumentado la tasa de cambio en 21%. Pinta mal”, dijo Oliveros. “Lo que vimos en noviembre y diciembre (de 2022) no es para ser optimistas. El gobierno hablaba de que la inflación en el resto del mundo estaba subiendo. Ya la inflación está bajando de manera acelerada, ya esa excusa tiene que dejarla a un lado”.
Redacción Maduradas con información de La Voz de América
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