El Instituto Nacional de Estadística ha plasmado en cifras lo que los venezolanos viven día a día: sus ingresos se desvanecen con rapidez y cada vez son más quienes ni siquiera cuentan con recursos suficientes para atender sus necesidades más básicas. En un año 1.795.884 personas pasaron a engrosar las filas de la pobreza, según los números difundidos por el INE.
El informe de pobreza, medida por línea de ingresos, revela que en el segundo semestre de 2012 el 25,4% de los venezolanos no contaba con recursos suficientes para adquirir la canasta básica, mientras que en el mismo período de 2013, la cifra había aumentado a 32,1%.
Comprar los alimentos básicos, pagar servicios prioritarios como salud, educación y transporte, es imposible para 9.174.142 venezolanos, pues sus ingresos son insuficientes.
Hogares golpeados
El número de familias que enfrenta la difícil realidad de la pobreza aumentó 6,1 puntos porcentuales en un año.
El Instituto Nacional de Estadística, muestra que 21,2% de los hogares estaban en situación de pobreza en el segundo semestre de 2012, mientras que un año después la cifra arropaba al 27,3% de los hogares.
En términos absolutos, esto significa que 1.899.590 familias venezolanas no contaban con dinero suficiente para poder atender necesidades prioritarias de alimentación, vestido y calzado, salud, transporte y educación.
Promesa que se aleja
«Para el año 2019, Venezuela debe llegar a tener cero por cien de pobreza en el país», auguró el presidente de la República, Nicolás Maduro, durante el lanzamiento del Sistema Nacional de Misiones en agosto del año pasado.
Sin embargo, los resultados difundidos por el INE muestran que se camina en dirección contraria a la consecución de este objetivo.
Las cifras evidencian que los avances importantes en materia de disminución de pobreza que se alcanzaron en 2012 se perdieron durante el año pasado, y la causa principal de esta desmejora está en el incremento constante que registraron los precios.
En 2012, el Gobierno logró uno de los índices de inflación más bajos del país en los últimos años, 20,1%, lo que evidentemente hizo que la pérdida de poder de compra del salario de los venezolanos fuera menor que en otros periodos y eso se reflejó en una disminución de la pobreza de 6,2 puntos porcentuales con respecto a 2011.
Pero este bienestar fue momentáneo, y los resultados se revirtieron el año pasado cuando la economía terminó con una inflación de 56,2%, lo que licuó los ingresos familiares. Las propias cifras del BCV indican que en el estrato más pobre de la población la inflación llegó en 2013 a 59%, así lo reporta El Universal.
Las perspectivas de que esta situación mejore en 2014 no son para nada alentadoras. Las empresas esperan ajustes de precios para compensar los incrementos de los costos, los transportistas aguardan por el segundo tramo en el alza del pasaje, el Gobierno anuncia revisión en las tarifas eléctricas y además no descarta abrir una discusión sobre el aumento del precio de la gasolina.
Firmas como Ecoanalítica proyectan una inflación de 75% al cierre de este año.