El cadáver de Jésica Ramírez Taborda, de 44 años, fue localizado a orillas del río El Ingenio, ubicado en Guatire, estado Miranda, fue estrangulada y quemada.
El hijo de la fémina, Eduardo Mendoza Ramírez, de 13 años, está desaparecido. Tanto él como su madre padecían discapacidad intelectual, ninguno sabía leer ni escribir.
Un mensaje de voz le notificó a la hermana de la víctima, quien reside en Maracay, estado Aragua, que debía viajar a Caracas: «vayan a buscar a La Catira que está en la morgue de Bello Monte».
La misma persona se ha seguido comunicando con los parientes de la mujer, pero les asegura que no puede llamarlos por tener dañado el audio de su celular; sin embargo, indicaron que desde ese número telefónico ella se comunicaba con su madre y hermanas porque se lo prestaban.
También les han indicado que el hijo de la víctima está a cargo del Cepna, en La Guaira, sin embargo no han podido confirmarlo.
Sobre el teléfono usado para enviarle mensajes a la familia de la víctima se desconoce a quien pertenece, los parientes intentaron denunciar ante la Policía científica y no se los permitieron por no conocer el nombre del autor de los mensajes.
Redacción Maduradas con información de El Nacional.
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