Las reservas de petróleo cayeron en enero hasta 2.695 millones de barriles, los pozos de petróleo típicos de esquisto disminuyen 60% anualmente, se estima que la demanda de petróleo para este año este en 1,17 millones de barriles diarios y aunado a esto, los precios mundiales del petróleo más bajos en comparación con años anteriores podrían afectar la producción del barril marginal de fuentes no convencionales como el crudo y líquidos de gas natural.
Se espera que el crecimiento de la oferta de petróleo de países no miembros de la Opep, crezca este año sólo en unos 850 mil barriles diarios, para ubicarse en una media de 57,16 millones de barriles por día. Mientras tanto, la meta de la Opep es mantener restringida la oferta y, de hecho, durante el mes de febrero se redujo en 140 mil barriles diarios para ubicarse en 30,02 millones de barriles diarios. Tales cifras corresponden al reporte de esta organización en marzo.
Los principales factores detrás de una predicción de crecimiento más lento reflejadas en el informe, están vinculadas a las expectativas de precios bajos del petróleo, y a una disminución del número de taladros activos en Norteamérica, una disminución en los permisos de perforación en los EEUU y la reducción del gasto de capital de las petroleras internacionales acordada para 2015.
Reportes indican que en Estados Unidos ha disminuido en 335 el número de equipos de perforación en febrero. De hecho, se prevé que la producción petrolera estadounidense se ubique en un promedio de 13,65 millones de barriles diarios en 2015, lo que indica un más lento crecimiento, de aproximadamente 820 mil barriles diarios.
Como consecuencia, las reservas de petróleo cayeron en enero hasta 2.695 millones de barriles. En términos de cobertura, las reservas comerciales de los países de la OCDE se situaron en 59,3 días, 1,5 días más altas que el promedio de cinco años. Los pozos de petróleo típicos en yacimientos de esquisto disminuyen 60% anualmente, y las pérdidas sólo pueden ser recuperadas mediante la perforación de nuevos pozos.
Mientras tanto, la recuperación económica mundial continúa, pero afectada por algunas de las secuelas de la crisis financiera mundial. La creciente importancia de políticas monetarias, así como altos niveles de deuda continúan en algunas economías clave y una variedad de deficiencias estructurales, sobre todo en los países emergentes y en economías en desarrollo, han llevado a un nivel de crecimiento mundial que aún permanece por debajo de su potencial.
Con información de El Universal.