El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) difundió la historia de la venezolana Isbel Bolívar quien huyó hacia Colombia para buscar una mejor calidad de vida para sus hijos.
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En este contexto, la connacional reveló que sus hijos comenzaron a cambiar su forma de ser porque tenían miedo de quedarse sin comida.
“Ver que tus hijos dejan de jugar y colorear por pensar: ‘Mami se acabó la harina, se acabó el arroz’”, declaró.
De igual forma, confesó que no tenía sustento económico para alimentar a su familia y que, por esta razón, decidió caminar por caminos montañosos desde Venezuela hasta el hermano país.
“Mis niños pasaban un día completo, 24 horas completas, sin comer. Para una madre no es fácil”, manifestó.
Por último, contó que “no se imaginaba” que tantos ciudadanos salieran de territorio nacional y que lo más difícil fue atravesar el páramo por el frío que hacía.
“Cuando íbamos a comenzar a caminar la gente me decía que les pusiera tres gorritos y pantalones porque hace mucho frío y se han muerto niños”, concluyó.
"Mami, se acabó la harina. Mami, se acabó el arroz".
Los hijos de Isbel dejaron de jugar porque solo podían pensar en que se quedaban sin comida. Se fueron de Venezuela y tuvieron que recorrer uno de los pasos más peligrosos y fríos en Colombia. https://t.co/SFhgxQV7Lh pic.twitter.com/3DaBEAtHS3
— Acnur/Unhcr Américas (@ACNURamericas) September 12, 2019
Redacción Maduradas.
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