El hambre sigue haciendo de las suyas en Venezuela. La comida no se consigue y la que se consigue no es suficiente para surtir a toda la familia ni para comer 3 veces al día como corresponde.
Al oeste de Maracaibo, en el sector Bella Orquídea, vive la familia Johan de Jesús Betancourt, un joven de 15 años, que se encuentra en estado de desnutrición severa y que pudiera morir de hambre en cualquier momento a falta de alimentos y recursos.
Foto: La Verdad.
Johan se encuentra en un estado de desnutrición extremo, pesando entre 10 y 15 kilos a sus 15 años de edad.
Su padre, Agapito Betancourt, explicó que la complexión de su hijo no corresponde a la de un joven de 15 años, asegurando que a su muchacho lo está matando el hambre.
La madre de Johan, tuvo complicaciones de preclampsia durante su embarazo, y eso provocó que el joven convulsionara teniendo dos días de nacido, repitiéndose la situación un mes después, para diagnosticarle hipoxia cerebral. Entre los tratamientos que le mandaban al joven para tratar la falta de oxígeno al cerebro, uno lo dejó ciego.
Señalaron que en la casa, de los artefactos eléctricos, el único que funciona es la nevera, pero no sirve de nada porque siempre está vacía, por lo que comen solo dos veces en el día, y a veces ni comen los padres, para poder alimentar a su otros dos hijos, quienes también han sufrido gran pérdida de peso.
La madre de Johan, trabaja limpiando casas por día, y el padre de vigilante, pero el dinero no les rinde para casi nada, y con lo poco que ganan sobreviven, pero aún así indican que lo único que les queda, es fe.
Johan come solo alimentos líquidos o en papillas, y estos días solo ha comido auyama y plátano, porque no consiguen más nada, y si hay no tienen el dinero para compararlo. La leche, por su parte, un alimento tan esencial, no se la dan a su hijo desde hace muchos meses, y ha ido bajando de peso exageradamente, los últimos días.
Con información de La Verdad.