Un niño de 8 años, identificado como Kendry Quevedo, pasó 10 días de agonía luego de ser quemado, en el interior de su vivienda, por su propia madre.
Carmen López, de 40 años, le prendió fuego a la casa, ubicada en el municipio Santa Rita de la Costa Oriental del Lago, luego de sostener una discusión con su marido, el pasado 25 de agosto.
López murió carbonizada en su vivienda. El niño fue trasladado al Hospital Coromoto de Maracaibo, donde murió el pasado sábado, tras presentar quemaduras en el 80% de su cuerpo.
Según Su Noticiero, su hermana, Susana López, logró escapar de las llamas.