«Son muy malos, malos, no han tenido compasión con nadie”, dijo Shirley Correa Mantilla, hermana de Lisbeth Ramírez Mantilla, entre lágrimas, sobre el régimen de Nicolás Maduro.
Familiares de Ramírez, quien murió el 15 de enero en una operación de las fuerzas de seguridad del Estado en El Junquito, junto con Óscar Pérez y su equipo, se encuentran en el Cementerio Metropolitano de San Cristóbal y aún no han recibido el cuerpo de la fallecida.
«Son muy malos, malos, no han tenido compasión con nadie. Y si siguen, van a seguir haciendo lo que quieren, lo que les da la gana», manifestó Shirley.
Pidió a la población despertar ante la crisis que el país atraviesa, causada por la mala administración del gobierno venezolano.
“Que la gente despierte, que no se dejen comprar por un bono de porquería, que no sirve para nada. La gente se contenta porque les llega 500 bolívares y eso no sirve para nada”, agregó.
El cadáver de Ramírez llegó vía aérea a la localidad. Se desconoce si el cadáver arribó al Aeropuerto de La Fría, al Santo Domingo del Táchira o al Aeropuerto de Paramillo.
Exclusiva con @lorearraiz Shirley Correa Mantilla hermana de Lisbeth Ramírez Mantilla #20DeEnero pic.twitter.com/AbD3J5u7OO
— 🟣 Te Lo Cuento News (@TeLoCuentoNews) January 20, 2018
Con información de El Nacional.