La crisis hasta los muertos la padecen. Ante la situación económica, la fabricación de urnas de metal y latón quedaron en el olvido ahora se construyen con aserrín o láminas de madera MDF, provocando que los dolientes puedan velar a sus familiares de 3 a 20 horas.
Foto: José Nava
La situación fue descrita por la periodista Mariela Navas de La Verdad, quien detalló que la producción de féretros es variada, por cuanto ahora los carpinteros se “las ingenian” para hacerlas más atractivas debido al material tan débil que implementan, el modelo que se busca y el tamaño que se requiere.
La más económica es la llamada “tapita” cuyo valor se equipara con un sueldo mínimo, sin embargo hay distintos precios en el mercado. Las de lámina de madera no son más resistentes y su precio también varía. La producción de ataúdes en Maracaibo está distribuida en 250 carpinterías, informa Navas, las cuales fabrican 100 urnas semanalmente.
Debido a la utilización de este tipo de materiales los riesgos que se corren son muchos: los líquidos del cadáver con la madera puede aflojar las láminas, dejar que los mismos se filtren y caigan al suelo o en el extremo no soportar el peso del cuerpo y ceder, por ello algunos fabricantes forran las urnas con aserrín para que absorba la humedad del cuerpo.
En el artículo, se informa que hay personas que deciden comprar el ataúd antes de morir, y guardarlo en su casa para evitar que el costo aumente.
Con información de La Verdad
También le puede interesar:
¡PREPARE EL BOLSILLO! Llegaron los productos importados al país pero a precios de infarto (+Lista)
La crisis ha arropado todos los sectores. Deje sus comentarios.