El alcalde metropolitano, Antonio Ledezma, aseguró este lunes que su huida de Venezuela se planificó «muy bien», por lo que aseguró que su salida del país no fue una improvisación.
Créditos: EFE
«Cuando recorría esos 1.200 kilómetros no pensaba en mi pellejo sino en mi país y los venezolanos. Me decía a mi mismo, caramba, si me agarran el gobierno me va a exhibir como un trofeo para desmoralizar a la gente», expresó durante una rueda de prensa en España.
Ledezma relató que cuando analizaron el mecanismo para salir del país consideraron que eran más los riesgos que la posibilidad de llegar a territorio libre, debido a que en su casa había entre 20 a 26 funcionarios, dos patrullas de la PNB en la parte exterior con tres funcionarios cada uno, mientras que en la parte interna estaban las patrullas del Sebin y funcionarios también en el sótano.
«Ellos se hicieron la idea que la salida mía era por el sótano. Estudiamos los hábitos de los funcionarios (…) A mi me hacían una fotografía todos los días con el periódico. Hubo una estrategia en los últimos días de como debería lucir para las fotos para evitar que me repitieran la fotografía. Me la jugué para que no repitiera la fotografía diciendo que me sentía mal y fue cuando salimos a primera hora de la mañana y luego vivir lo que vivimos que fue 29 alcabalas que estaban activas», comentó.
El alcalde reveló que hubo colaboración de gente que «se la jugó». En ese sentido, consideró que Maduro sabe que para pasar 29 alcabalas tuvo que haber colaboración de efectivos militares que hoy en día deben sentir vergüenza de lo que hoy ocurren en la Fanb.
«En la recta final para cruzar la frontera una señora de buena fe me reconoció y dijo Ledezma, en ese momento un GNB me miró y me dijo siga adelante«, finalizó.
Redacción Maduradas