El intento de ingreso de Delcy Rodríguez, vicepresidente del régimen de Nicolás Maduro, a territorio español aún tiene tela que cortar, más aún con el ministro español de Transportes, José Luis Ábalos, en el centro de la polémica por haber sostenido una reunión con la funcionaria venezolana en la madrugada del lunes 20 de enero.
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De acuerdo con el portal ALNavío, Rodríguez estaba tan convencida de poder entrar al país europeo, pese a las sanciones que reposan sobre ella, que planificó reuniones con al menos dos empresarios que se encontraban, respectivamente, en España y Venezuela.
Además, aparentemente, se alojaría en el hotel Paseo de La Castellana, en donde una de las fuentes consultadas por el medio de comunicación mencionó, sin saber todavía que Rodríguez estaba retenida en el aeropuerto de Barajas, afirmó, casi por casualidad, que tenía previsto reunirse con la vicepresidente venezolana.
“(Rodríguez) está en Madrid, en este hotel. Llegó anoche. Seguro la veré”, dijo, entonces, la fuente.
Sin embargo, pese a todos los mecanismos diplomáticos que se pudieron en marcha para que la funcionaria ingresara a España, Ábalos tuvo que dirigirse al terminal aéreo para supuestamente persuadir a Rodríguez de no bajarse del avión.
«Hay que imaginarse la rabieta de esta mujer menuda queriendo bajar del avión y hay que imaginarse al comisario de fronteras llamando a su superior para indicarle lo que estaba pasando, y este llamando al ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska, y este luego llamando al ministro de Transporte, José Luis Ábalos, para que la persuadiera de que aquello era una insensatez«, apuntó parte de la nota de ALNavío.
El portal afirma que Delcy, seguramente, tenía una fuente en el gobierno de Pedro Sánchez, que fue la que aseguró al régimen que la vicepresidente podría ingresar a España sin problemas. Aún no se ha dado a conocer quién es esa fuente.
Redacción Maduradas con información de ALNavío
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