Miles de migrantes han sido enviados desde el pasado mes de abril hacia Washington, capital de Estados Unidos, desde Texas o Arizona, en medio de un récord histórico de llegada de migrantes por la frontera sur que ha afectado a los estados limítrofes.
BBC Mundo.
En lo que va de año, la Patrulla Fronteriza reportó aproximadamente 1,8 millones de detenciones y las autoridades estiman que esta cifra aumente a 2 millones para el comienzo del año fiscal 2023 en octubre.
Luego de que el gobierno de Joe Biden anunciara el fin del «Título 42» que autorizaba el envío de los migrantes a México por temor a la propagación del coronavirus, el gobernador de Texas, Greg Abbot, anunció que enviará a los migrantes en autobuses hasta Washington como forma de protesta para que en la capital tengan un poco de la situación que atraviesan los estados limítrofes.
«Debido a la continua negativa del presidente Biden a reconocer la crisis causada por sus políticas de fronteras abiertas, el estado de Texas ha tenido que tomar medidas sin precedentes para mantener seguras a nuestras comunidades«, señaló Abbott.
El gobernador de Arizona también se sumó a esta decisión y comenzó a enviar autobuses con migrantes a Washington, y después desde ambos estados también envían a Nueva York.
Los autobuses también son enviados a Delaware, estado natal de Biden, y a Chicago, donde las autoridades locales han tildado esta iniciativa como un acto «racista y falta de humanidad». Además, esto ha comenzado a poner límites a las capacidades de recepción de algunos destinos.
«Al principio pensamos que era solo una jugada de propaganda política, que los gobernadores enviarían un par de buses por unas semanas a Washington y cantarían victoria», dijo Abel Núñez, director del Centro de Recursos Centroamericano (Cercacen), una organización que se ha encargado de recibir y apoyar a los migrantes que llegan a Washington.
A esto, agregó: «Pero cuando los buses continuaron llegando todos estos meses y se siguieron enviando a otras ciudades, entendimos que la situación era más seria. Y esto es una bomba de tiempo. Se está generando una crisis humanitaria silenciosa, una de las peores crisis humanitaria que ha vivido la capital de Estados Unidos».
Las estimaciones de grupos civiles son más de 7.400 migrantes que han llegado a Washington desde Texas y Arizona y unos 2.000 a Nueva York, la mayoría de estos ciudadanos provienen de Venezuela, Cuba y Nicaragua.
Redacción Maduradas con información de BBC.
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