Recientemente, la exmodelo Stacey Williams afirmó haber presentado una acusación formal de abuso sexual en contra de Donald Trump, expresidente de Estados Unidos y actual candidato demócrata a la Presidencia del país norteamericano.
«La idea de que este monstruo regrese a la Casa Blanca es mi peor pesadilla«, manifestó Williams, durante una conversación con el grupo Survivors for Kamalam, una coalición de personas sobrevivientes de agresiones sexuales que apoya a la candidata demócrata Kamala Harris.
La mujer utilizó el espacio para compartir su experiencia por una presunta agresión sexual que sufrió a manos de Donald Trump en 1993.
Según comentó, habría conocido al líder demócrata a través de Jeffrey Epstein, con quien ella salió durante unos meses.
«Quedó muy claro que él y Donald eran muy, muy buenos amigos y pasaban mucho tiempo juntos», dijo.
Al parecer, Epstein le sugirió que pasaran a visitar a Donald en la Torre Trump. Sin embargo, a los pocos minutos de haber llegado, Trump no solo saludó a Williams sino que la atrajo hacia él y comenzó a manosearla, lo que la habría dejando «profundamente confundida», especialmente, porque le pareció ver que los dos hombres se sonreían uno al otro.
Describió cómo el supuesto incidente le pareció parte de un «juego retorcido» entre ambos.
«Sentí vergüenza y asco y, mientras tomábamos caminos separados, sentí esta sensación de revivirlo, mientras sus manos estaban sobre mí. Y tenía este horrible vacío en el estómago porque de alguna manera lo que sucedió estaba orquestado. Me sentí como un trozo de carne«, agregó.
A pesar de que lograron irse después, Epstein la habría reprendido: «¿Por qué le dejaste hacer eso?».
Epstein es considerado uno de los peores y más prolíficos pedófilos de la historia moderna, quien fue condenado por sus actos y se suicidó en prisión.
Redacción Maduradas con información de Democracy Now
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