Raúl Isaías Baduel, egresó de la Academia Militar en 1976 en la promoción “General de Brigada Francisco Carabaño” con el título de Licenciado en Ciencias y Artes Militares. La relación amor – odio con el “gigante” los llevó a ser compadres y oponerse en la consulta por la Reforma Constitucional del 2007. El vínculo se terminó de romper luego que por recomendación de Fidel Castro ordenara su encarcelamiento por el presunto desvío de 3,9 millones de dólares.
Aunque formó parte del “juramento bolivariano” ante el Samán de Güere junto a Hugo Chávez, Jesús Urdaneta Hernández y Felipe Antonio Acosta Carlés, luego fue execrado por no participar en los golpes de Estado. Asumió posiciones de mando como Comandante General del Ejército entre enero de 2004 y julio de 2006, y ministro de la Defensa de Chávez entre junio de 2006 y julio de 2007.
Su vinculación con Chávez no solo fue militar, llegó a niveles familiares, éste junto a Cecilia de Torres –esposa del exbanquero Pedro Torres Ciliberto – son los padrinos de la hija menor del ahora General retirado, Isaí. El 13 de abril del año 2002 siendo Comandante de la Brigada de Paracaidistas del Ejército encabezó la operación “Restitución de la Dignidad Nacional”, que tenía como objetivo “restaurar el hilo democrático y la paz social luego del Golpe de Estado, y rescatar de su cautiverio al presidente Hugo Chávez”, obteniendo el éxito y consiguiendo el retorno del mandatario al Poder.
Sus primeros pasos públicos en la disidencia al chavismo los dio durante la consulta electoral por la reforma a 69 artículos de la Constitución Nacional en diciembre de 2007, proceso en el que se opuso al proyecto promovido por Chávez y aupó el no, opción que resultó ganadora con el 50,70% de los votos.
El 2 de abril de 2009 fue detenido y permaneció recluido en Ramo Verde hasta la noche del pasado miércoles, cumpliendo una condena de siete años y 11 meses dictada por el Tribunal Primero de Juicio del Circuito Judicial Penal Militar, luego de haberlo encontrado culpable por la sustracción de fondos públicos, abuso de autoridad y delitos contra el decoro militar.
Específicamente habría sido demostrado que estando al mando de la cartera castrense “fueron desviados 30 millones de bolívares y 3,9 millones de dólares con fines distintos a lo declarado en la administración militar”, cita la sentencia.
El 14 de mayo de 2010, el exfuncionario aseguró a la agencia Reuters que no se sentía un preso político sino un reo de Chávez y auguró que otras personas que se opusieran al entonces mandatario correrían similar suerte. “Quien contraríe los caprichos de Hugo Chávez se expone al uso excesivo del Poder y al autoritarismo (…). Soy un preso de Hugo Chávez (…).Nunca estuve inscrito en el proyecto personalista de Chávez. Nunca fui chavista”, planteó.
“Soy un preso de conciencia por orden de Hugo Chávez, quien cumplió las instrucciones que en junio de 2005 en Guaraguao, Puerto La Cruz, estado Anzoátegui, le dictó Fidel Castro, quien le dijo entre otras cosas que yo no era digno de confianza y no aceptaba su liderazgo, por considerarme más inteligente que él”, reveló.
Información de El Cooperante.