Cuando analizamos las capacidades de las empresas públicas para producir en los distintos sectores de la economía, nos encontramos que tienen todos los medios necesarios para lograrlo, así como cubrir nuestro consumo y exportar. Además disponen de excelentes tierras, muchas agro-industrias, industrias, así como infraestructura eléctrica para lograr metas adecuadas de producción.
Así lo expresa Vicente Brito, Presidente de la Red por la defensa al Trabajo, la Propiedad y la Constitución. Y agrega:
«El gobierno tiene el monopolio de los principales medios de producción y control de casi toda nuestra economía, entonces por qué no se produce y las razones para que no logremos aunque sea cubrir buena parte de nuestras necesidades.»
Nos permitiremos hacer algunos análisis en relación a estas consideraciones y podemos afirmar que en la medida que el sector privado ha sido desplazado de las actividades económicas por la pública, observamos caídas preocupantes en cantidades producidas, así como desmejora en calidad y condiciones de las tierras y empresas privadas que pasan a su responsabilidad.
Hoy el gobierno tiene el monopolio de todo el sistema eléctrico nacional, el cual presenta limitaciones y fallas, a pesar de haber recibido este sector la mayor inversión (desde que se inició la electricidad en el país) para generar más de 15.000 megavatios, no se sabe con exactitud el monto invertido pero buena parte de los recursos iniciales del fondo chino se utilizó para ello. Por lo que consideramos no debe haber razones para tener las constantes suspensión de servicios eléctricos que observamos a lo largo y ancho del país.
Cuando comparamos los rendimientos de las empresas eléctricas que anteriormente eran privadas y luego pasaron a públicas son evidente los efectos en calidad de servicio, sobre todo por la falta de mantenimiento adecuado y oportuno.
Las necesarias inversiones que este sistema requiere son mayores cada día, por su alta dependencia en tener que importar buena parte de sus equipos.
El monopolio productivo de tierras, silos, agro-químicos y agro-industrias, que están bajo la administración gubernamental es el mayor del país y disponen de más del 60% de la capacidad instalada nacional. Lo cual le permite al gobierno poder producir y procesar hasta un 75% del consumo nacional de alimentos pero las mismas solo alcanzan alrededor de un 20%.Lamentablemente se observan fallas y complejidades en el manejo de este gran conglomerado público para producir alimentos.
Las más importantes y estratégicas industrias del país están en manos del gobierno, empresas de acero, aluminio, cemento, fábricas de vehículos, tractores, equipos petroleros, astilleros, etc. Aquí podemos observar desmejoras no justificables en sus instalaciones así como caídas preocupantes en toneladas y calidad, con bajos niveles de productividad.
El Gobierno ejerce el monopolio de las empresas de cemento y aluminio además tiene el control de la producción y distribución. Así como en acero donde es el mayor productor de casi el 80% del total de la capacidad instalada. Se está importando parte del consumo nacional de estos productos. Pero cuando estaban en manos privadas se cubría la demanda nacional y se exportaba. Los ingresos en dólares por la exportación de acero, aluminio y cemento, entre 1995 y el 1998 supero los 5.000 millones de dólares.
Los resultados numéricos nos indican que en la medida que el gobierno ha tomado a las empresas y tierras privadas para convertirlas en públicas, se observa una desmejora sustancial en sus niveles de producción y un aumento de las importaciones. Lo más grave son los aportes mil millonarios en bolívares y dólares que se tienen que hacer para cubrir las necesidades financieras y operativas crecientes de este monopolio empresarial público por sus elevadas pérdidas, siendo muy pocas las que logran metas de producción o no pierden dinero.
Si parte del monto utilizado durante los últimos 8 años para sostener este “monopolio público de producción” se hubiera invertidos en salud y educación hoy tuviéramos mejoras reales en calidad de vida y formación académica.
Es evidente que el gobierno es el que tiene los mayores monopolios económicos de la nación en los más importantes sectores productivos. Cuando lo comparamos al resto de los países del continente, nos encontramos que Venezuela es la de mayor porcentaje de activos empresariales públicos comparado a los privados, al gobierno ser dueño o tiene amplio control de casi el 85% del patrimonio económico y productivo del país: petroleras, telecomunicaciones, bancos, medios de comunicación, acero, aluminio, cemento, hatos, fincas, haciendas, líneas aéreas, hoteles, barcos, redes de distribución y comercialización de alimentos, electrodomésticos, agroindustrias para procesar aceite, maíz, arroz, azúcar, pollos, procesadoras de pescado y la mayor flota de pesca de la región, etc.
Es pública y notoria la caída de la producción y productividad de este gran entarimado monopólico empresarial público que es dueño de todo pero poco produce.
Fuente: La Patilla.