El gas lacrimógeno es uno de los nuevos sabores en una heladería de Hong Kong.
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El ingrediente principal son los granos de pimienta negra, un recordatorio de las rondas acre y picantes disparadas por la policía en las calles de la ciudad china semiautónoma durante los meses de manifestaciones del año pasado.
“Sabe a gas lacrimógeno. Al principio se siente difícil respirar, y es muy picante e irritante. Me dan ganas de beber mucha agua de inmediato «, dijo la cliente Anita Wong, que experimentó gases lacrimógenos en una protesta. «Creo que es un flashback que me recuerda lo doloroso que me sentí en el movimiento, y que no debería olvidarlo».
El sabor es una señal de apoyo al movimiento prodemocrático, que busca recuperar su impulso durante la pandemia de coronavirus, dijo el dueño de la tienda. Habló bajo condición de anonimato para evitar las repercusiones del gobierno pro-Beijing.
«Nos gustaría hacer un sabor que les recuerde a las personas que todavía tienen que persistir en el movimiento de protesta y no perder su pasión», dijo.
Probó diferentes ingredientes, incluyendo wasabi y mostaza, en un esfuerzo por replicar el sabor del gas lacrimógeno. La pimienta negra, dijo, se acercaba más al gas lacrimógeno con sus efectos irritantes para la garganta.
“Asamos y luego molimos granos de pimienta negra enteros y los convertimos en gelato, al estilo italiano. Hace un poco de calor, pero destacamos su retrogusto, que es una sensación de irritación en la garganta. Simplemente se siente como respirar gases lacrimógenos ”, dijo el dueño de 31 años.
Según las autoridades de Hong Kong, se dispararon más de 16,000 rondas de gas lacrimógeno durante las protestas, muchas en distritos densamente poblados donde calles estrechas están llenas de pequeños restaurantes y bloques de apartamentos.
Las protestas comenzaron por la legislación propuesta que habría permitido que los presuntos delincuentes fueran extraditados a China continental para enfrentar cargos. Mientras se retiraban los proyectos de ley, las manifestaciones continuaron por la preocupación de que Beijing está erosionando las libertades civiles otorgadas a la antigua colonia británica cuando regresó al dominio chino en 1997.
La heladería también ofrece un espacio para que las personas expresen sus puntos de vista sobre el movimiento, incluido el uso de notas adhesivas que aparecen en las «paredes de Lennon» que aparecieron en todo el territorio en el apogeo de las manifestaciones.
Dichas expresiones se remontan a las protestas de Occupy Central 2014, cuando una gran escalera que conducía a la sede del gobierno de Hong Kong estaba repleta de miles de notas con mensajes de apoyo.
Con alrededor de $ 5 por porción, el helado de gas lacrimógeno ha sido un éxito. Antes de las regulaciones de distanciamiento social sobre el brote de coronavirus, el dueño de la tienda dijo que estaba vendiendo 20-30 cucharadas por día.
La manifestación se ha desvanecido en su mayoría a medida que la ciudad lucha contra el coronavirus, pero existen grandes expectativas de que puedan surgir acciones más grandes durante el verano. La policía ya ha estado en vigor para disuadir grandes reuniones y el gobierno está presionando con una legislación que convertiría en delito burlarse del himno nacional chino.
Redacción Maduradas con información de AP
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