El Gobierno de República Dominicana afirmó que la entrega este lunes, 2 de septiembre, a las autoridades de Estados Unidos del avión oficial de Nicolás Maduro, que se encontraba en el país desde mayo pasado por cuestiones de mantenimiento, fue autorizada tras dos órdenes de la Justicia dominicana.
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El ministro de Relaciones Exteriores dominicano, Roberto Álvarez, afirmó que el gobierno no intervino en el proceso y que se limitó a cumplir con lo ordenado por los tribunales del país, al tiempo que aseguró que la aeronave no estaba a nombre de Maduro ni del Gobierno de Venezuela, sino de una empresa particular.
En un movimiento que ha intensificado las tensiones entre EEUU y el chavismo, las autoridades estadounidenses incautaron dicha aeronave, en la República Dominicana.
El avión, un Dassault Falcon 900EX, fue confiscado debido a violaciones de las sanciones adoptadas por Estados Unidos a Venezuela. El mismo, valorado en aproximadamente 13 millones de dólares, ha sido utilizado regularmente por Maduro para sus viajes oficiales.
La incautación se llevó a cabo en colaboración con las autoridades dominicanas y forma parte de una serie de acciones destinadas a interrumpir el flujo de recursos hacia el régimen venezolano.
Según funcionarios estadounidenses, la adquisición del avión violó las leyes de control de exportaciones y sanciones de EEUU. Esto, porque fue comprada a través de una empresa fantasma para ocultar la participación de personas vinculadas a Maduro.
En consecuencia, la aeronave ha sido trasladada a Florida, donde permanecerá bajo custodia de las autoridades estadounidenses.
Redacción Maduradas con información de Telemundo
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