Luis Fernando Camacho, el líder cívico que dirigió el movimiento que impulsó la renuncia de Evo Morales, expresó este 11 de noviembre su rechazó a la versión acerca de un golpe de Estado en Bolivia, que calificó de “totalmente falsa”.
Reuters
“Nuestra posición fue bajo la resistencia pacífica en las calles pidiendo en función de los tiempos primero nuevas elecciones y después una renuncia en función de la palabra que empeñó el presidente Morales sobre que si había muertos en su gobierno renunciaría. Sin embargo, los muertos que existieron fueron por parte del Ejecutivo”, aseguró en un video publicado en redes sociales.
Camacho logró llegar este 10 de noviembre hasta la sede de gobierno para consignar una carta de dimisión para que Morales la firmara, esa misma fecha el ex mandatario por 14 años consecutivos renunció a su cargo.
“No tumbamos gobiernos, liberamos un pueblo en fe. Solo se llevó una biblia a Palacio. Una biblia y una carta de renuncia en función de lo antes mencionado y a los 15 minutos renunció el presidente”, afirmó el líder cívico.
A pesar de que no se presentó en las elecciones del pasado 20 de octubre, Camacho se convirtió en uno de los actores políticos más relevantes de la situación en Bolivia, y uno de los principales blancos de las críticas de Morales, que lo tilda de golpista.
“Este gobierno renunció sin una bala por parte del pueblo, renunció solo con la fe puesta en Dios, con el pedido clamoroso del pueblo boliviano de llevar a nuestra nación a mejores días”, aseguró Camacho. Además, argumentó que la intención del movimiento es “llegar a una transición democrática, constitucional y por el bien del pueblo” de Bolivia.
Redacción Maduradas con información de Infobae.
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