De acuerdo con un artículo publicado por Correo del Caroní entre 2018 y lo que va de 2019 han fallecido 15 niños a la espera de trasplantes de médula ósea y medicamentos en el estado Bolívar.
Foto: Efecto Cocuyo
El pasado 25 de mayo Karla Trillo, una niña de 11 años que padecía leucemia aguda desde los 5 años, falleció esperando un trasplante de médula.
Con ella, serían 7 los menores de edad fallecidos en lo que va de 2019. En 2018, murieron 8 pequeños en circunstancias parecidas.
Aparentemente, a pesar de que, cada 21 días, Karla y su papá asistían al Hospital Uyapar en Puerto Ordaz para buscar medicinas y hacerse quimioterapias, desde hace casi 1 año, dejaron de asistir por la decadencia y las carencias del lugar. En su lugar, asistían a la Fundación Lala.
En la Fundación Lala solo una niña, de nombre Eilyn, sobrevive mientras espera también un trasplante de médula ósea.
La mamá de Eilyn manifiesta que el hecho de que su hija sea la única niña que sigue viva es “deprimente”.
«Cuando muere un niño, uno siente una depresión grande, hablo de eso y es llorar. Ella también me dice: ‘;ami, no quiero que me pase lo mismo que fulanito’. Trato de ser fuerte, pero no es fácil. Hemos visto que los demás han muerto y ella es la única de ese grupo que queda viva. Que Dios me la guarde», manifestó la mujer con evidente preocupación.
Redacción Maduradas con información de Correo del Caroní
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