Este lunes 1 de junio, comenzó la primera semana de flexibilización de la cuarentena social decretada por el régimen de Nicolás Maduro, como respuesta a la pandemia por el COVID-19.
Pese a la información compartida por el madurismo, los ciudadanos se encontraron con un ambiente de caos y desconcierto, ya que ni adultos mayores, ni niños podían utilizar el transporte público.
De acuerdo con Crónica Uno, de hecho, el Metro de Caracas solo podía ser utilizado por pasajeros que contaran con carnet laboral, ni el salvoconducto funcionaba para usar el transporte subterráneo.
Las autoridades del régimen informaron que el transporte público funcionaría en un horario comprendido entre las 7:00 am y las 5:00 pm con las medidas de seguridad correspondientes de distanciamiento social y uso del tapabocas. Sin embargo, incluso antes de iniciada la flexibilización, ya se veían autobuses abarrotados de personas. Este lunes, no fue la excepción. Además, había mucha más gente en la calle.
Unido a lo anterior, el costo del pasaje se ubicó entre Bs. 10.000 y Bs. 20.000.
“Esta mañana he visto que el flujo de pasajeros subió 70% y aquí solo están trabajando las busetas de gasoil porque las que usan gasolina están haciendo colas”, dijo Richard Morales, conductor de la ruta La Rinconada- La Hoyada.
Los pasajeros estaban muy desorientados, pues no había Cinformación clara al respecto de la nueva “normalidad vigilada y controlada”.
Redacción Maduradas con información de Crónica Uno
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