El pasado jueves 20 de octubre, autoridades mexicanas denunciaron el hallazgo de 112 migrantes hacinados en una vivienda en Nuevo León, estado fronterizo del norte del país. Aparentemente, funcionarios policiales habrían escuchado gritos que provenían de dentro del inmueble, cuando decidieron investigar.
A pesar de que la información fue difundida el 20 de octubre, funcionarios detallaron que los hechos se produjeron el pasado miércoles 19, en el municipio de Salinas Victoria, a unos 36 kilómetros de la ciudad de Monterrey.
De acuerdo con lo reseñado por EFE, tras acercarse al lugar, los uniformados estatales fueron abordados por dos mujeres que les informaron que formaban parte de un grupo numeroso de migrantes que llevaban varios días sin comer, por lo que «temían» por su salud y vida.
Además de esto, también detectaron la presencia de dos ciudadanos que, presuntamente, eran los encargados de llevar a los migrantes hasta la frontera con Estados Unidos. Los presuntos traficantes de personas fueron identificados como Daniel «N», de 23 años; y Pedro «N», de 34 años. Fueron puestos a la orden de las autoridades.
Entre los 112 migrantes figuraban 67 hombres, 31 mujeres y 12 menores de edad, de distintas nacionalidades que no fueron detalladas.
Redacción Maduradas con información de EFE
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