Human Rigths Watch publicó este lunes un informe donde denuncia las violaciones a los derechos humanos durante las protestas que se realizan en Venezuela desde el pasado 4 de febrero.
El gobierno de Venezuela ha violado los derechos de los manifestantes opositores mediante golpizas, detenciones ilegales e incumplimiento de sus garantías procesales, dijo el grupo de derechos Human Rights Watch en un informe divulgado el lunes.
El grupo, que el gobierno socialista de Venezuela describe como peón de Estados Unidos, dijo que los cuerpos de seguridad del Estado usaron fuerza excesiva contra manifestantes pacíficos y que fiscales y jueces toleraron los abusos.
El informe hace eco de las denuncias de la oposición al manejo que ha dado el presidente Nicolás Maduro a las protestas, pero también se refirió brevemente a la violencia provocada por los manifestantes.
El informe del grupo con sede en Nueva York se basó en la investigación, en marzo, de 45 casos de “graves violaciones a los derechos humanos”.
El grupo entrevistó a más de 90 personas, incluyendo a las víctimas, sus familiares y más de una docena de abogados defensores.
“En la mayoría de los casos que documentamos, las fuerzas de seguridad emplearon fuerza ilegal, incluyendo disparos a personas desarmadas”, dice el informe. “Casi todas las víctimas también fueron arrestadas y, mientras se encontraban detenidas, fueron sometidas a abusos físicos y psicológicos”.
El grupo denunció 10 casos de tortura, con incidentes de descargas eléctricas, quemaduras y amenazas de violación o violaciones.
Desde que se iniciaron las protestas antigubernamentales en febrero, 41 personas han muerto, según cifras oficiales, incluyendo partidarios del gobierno y de la oposición, además de efectivos de las fuerzas de seguridad.
Cerca de 800 personas han resultado heridas y más de 2.000 han sido detenidas, de las cuales 197 permanecen en la cárcel.
La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega, admitió “excesos” de las fuerzas de seguridad durante la represión a las protestas, pero ha negado acusaciones de una campaña sistemática de violaciones a los derechos humanos.
La Fiscalía ha abierto 142 investigaciones de violaciones de derechos humanos, entre ellas una de tortura. Diecisiete funcionarios están detenidos por esas pesquisas.
Durante semanas, manifestantes armados con piedras y bombas molotov han levantado barricadas en las calles y se han enfrentado a la policía antimotines que los dispersa con cañones de agua y gases lacrimógenos.
Las manifestaciones comenzaron en reclamo por la delincuencia, la inflación y la escasez de productos básicos. Pero las acusaciones de abuso policial durante los disturbios rápidamente se convirtieron en una motivación para las protestas, que han menguado, sin embargo, en las últimas semanas. No obstante, el Gobierno de Maduro parece haber capeado lo peor de las protestas.
Reuters.