Un hombre falleció en un supermercado en el noreste de Brasil, pero a pesar del inesperado hecho el comercio mantuvo sus puertas abiertas después de que alguien cubriera el cadáver con cajas y sombrillas.
El suceso se conoció por las denuncias de los usuarios en las redes sociales. La empresa reconoció el hecho en un comunicado ante las presiones.
Para quem não soube, para quem não deu a devida importância: Hoje, um ser humano, repetindo, UM SER HUMANO, chamado Moisés Santos, representante de vendas de uma empresa não divulgada, faleceu pela manhã dentro de um @carrefourbrasil no Recife. Teve um infarto fulminante. pic.twitter.com/KgSrrEfmMb
— pedro beck (@pedrobeck) August 19, 2020
La filial brasileña del grupo francés Carrefour confirmó la información en un comunicado, en el que pidió disculpas por la actuación. «Carrefour pide disculpas en relación con la forma inadecuada en que trató el triste e inesperado fallecimiento del señor Moisés Santos, víctima de un ataque cardíaco, en la tienda de Recife (Pernambuco). La empresa se equivocó al no cerrar la tienda inmediatamente después del hecho, a la espera del servicio funerario», dice el texto.
Nota Oficial do Carrefour pic.twitter.com/t4i1h0iPUq
— Carrefour Brasil (@carrefourbrasil) August 19, 2020
La empresa informó que la víctima era un promotor de ventas y que recibió los primeros auxilios y pidió asistencia médica. Carrefour agregó que después del fallecimiento, la disposición fue de no mover el cuerpo.
Aseguran que tuvieron que cambiar las orientaciones a los colaboradores para situaciones raras como esta, que incluyen la obligatoriedad de cerrar la tienda.
La esposa del fallecido dijo a la prensa local que la víctima se llamaba Manoel Moisés Cavalcante.
«Me indignó. El ser humano no vale nada, a las personas solo les importa el dinero. Creo que era una cuestión de respeto. Es un sentimiento horrible», dijo Odeliva Cavalcante, en entrevista al portal de noticias G1.
Redacción Maduradas con información de La Nación
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