Con varios medios estadounidenses proyectando al candidato demócrata, Joe Biden, como futuro presidente de los Estados Unidos, comienzan a surgir análisis de los cambios en la posición económica que podría enfrentar el aspirante a la reelección, Donald Trump.
Según reseñó Forbes, antes de la presidencia, Trump ni siquiera tenía previsto lograr ganar las elecciones, sino que lo habría visto como una excelente oportunidad de marketing.
Sin embargo, ganar las elecciones también representaba un escenario poco rentable económicamente, debido a que asumir la presidencia significaba a su vez rechazar una docena de acuerdos.
Por ejemplo, Trump no seguiría ganando dinero con The Apprentice, que se emitió de 2004 a 2015 y le proporcionó 214 millones de dólares. Asimismo, solo en los primeros días de campaña en 2016, los socios de licencias de productos se distanciaron luego de que realizara polémicos comentarios relacionados con los migrantes mexicanos.
«El actual jefe de Estados Unidos no es conocido por su destreza literaria, pero en realidad ha publicado más de una docena de libros, lo que lo convierte en uno de los multimillonarios más publicados en Estados Unidos. Dado todo lo que ha visto en el cargo, Trump debería tener mucho material nuevo», vaticinó Forbes.
Por otro lado, aseguran que varios líderes empresariales del extranjero ya han expresado que esperan la salida de Trump de la Casa Blanca, para acordar nuevos negocios.
En cuanto a la cartera de condominios del mandatario, un estimado de 17 apartamentos que posee en la ciudad de Nueva York por valor de 100 millones de dólares, cayeron aproximadamente un 32% de 2015 a 2019. Esto habría sido ocasionado presuntamente porque en su ciudad natal, Trump obtuvo solo el 14% de los votos, es decir, demostró ser un estado donde no cuenta con gran estima.
A pesar de ello, Forbes destaca que una derrota para el republicano no sería del todo buena. Principalmente, porque abandonar el cargo de presidente significa que ya no contará con la protección por la que el Ejecutivo no puede ser procesado por delitos federales. En su caso, Trump enfrenta varias investigaciones precisamente en el distrito de Manhattan y el fiscal general del estado de Nueva York, por presuntas irregularidades en el manejo de sus finanzas.
Redacción Maduradas con información de Forbes