50 funcionarios de la Penitenciaria General de Venezuela (PGV), en el estado Guárico, permanecen como rehenes de los llamados «pranes» de este recinto carcelario, donde desde hace tres días se mantiene esta situación.
Los trabajadores de guardia del lunes 1 de agosto fueron víctimas de un secuestro, organizado por los presos a los que ellos prestan un servicio público. Hasta la tarde de este miércoles, los funcionarios seguían como rehenes.
Crédito: Efecto Cocuyo
Los “pranes” de la PGV piden el traslado hacia esta cárcel de 1.500 internos que se encuentran recluidos en otros lugares, según versión de familiares de los secuestrados a Efecto Cocuyo.
«Ellos nos dijeron que era como medida de presión para que venga la ministra (Iris Varela). Estamos en la oficina y no podemos salir», dijo uno de los secuestrados a un allegado.
El mensaje a transmitir era: “Estamos bien. Nos dieron comida. No se preocupen”, eran las palabras de quienes pudieron dar una prueba de vida a sus familiares.
Entre los rehenes habrían 15 mujeres secuestradas, un par de ellas embarazadas. Los reos los mantenían encerrados en la biblioteca del recinto carcelario, dijo uno de los funcionarios a otro familiar, esto fue el mismo lunes, desde entonces no conocen más noticias de sus seres queridos.
Sectores vecinos a la PGV aseguraron escuchar detonaciones. Habitantes de los barrios Bella Vista, Vista Hermosa y Vista El Morro tuvieron que resguardarse en sus viviendas por temor a ser alcanzados por lo que, ellos aseguran, eran balas.
Con información de Efecto Cocuyo.
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