Yanín Pernía, una de las personas que habría participado en el supuesto intento de magnicidio del año pasado, fue víctima de maltratos cuando estuvo detenida en la sede de Boleíta de la Dgcim.
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Yanín Pernía (@YaninPernia) – Dgcim
La denuncia la hizo en entrevista para el site Noticiero Digital.
«Me metían coñaz*s en la cara, hombres y mujeres, policías, militares, me amenazaban, me amedrentaban, me metían patadas en los oídos, en la cara, hasta que se me rompían los vasitos”, expresó la masoterapeuta de aproximadamente 25 años de edad.
Pero luego fue trasladada al INOF, ubicado en Los Teques, donde viste uniforme verde fluorescente, utilizado por las mujeres en la «zona de resguardo».
Sobre por qué falló el atentado, explicó que el problema fue que no se esperaban que los inhibidores de transmisión estaban encendidos. Estos afectaron la comunicación de los drones, que llevaban los explosivos que tenían como objetivo herir a Nicolás Maduro.
«Desde allí todo salió mal porque los efectivos de seguridad detectaron de dónde venía el ataque”, indicó.
Redacción Maduradas con información de Noticiero Digital
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