Daniel Porter, de 36 años de edad, se despertó en julio de 2020 creyendo que se encontraba en 1999 tras no recordar las últimas 2 décadas de su vida debido a una afección cerebral.
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Porter abrió los ojos y se encontraba acostado junto a su esposa Ruth, de 37 años de edad, sin embargo, no sabía dónde estaba y pensaba que era hora de prepararse para ir a la escuela.
El hombre, que vive en Granbury, en Texas, no recordaba a su esposa ni a su hija, Libby, de 10 años de edad. Ruth, aún confundida por lo que sucedía, se vio obligada a convencerlo de su vínculo y de que no lo había secuestrado. Tuvo la ayuda de sus padres para ello.
“Se despertó una mañana y simplemente no tenía idea de quién era yo o dónde estaba. Estaba muy confundido. Me di cuenta de que no reconoció la habitación. Pensó que lo habían raptado. O que estaba borracho y se había ido a casa con una mujer”, explicó Ruth.
Aseguró que Porter “pensó que le estaba poniendo la ropa de mi esposo, y que mi esposo podía volver en cualquier momento y sorprendernos”, reseña Mirror.
Luego de acudir al hospital, el hombre fue diagnosticado con amnesia global transitoria, que consiste en una interrupción repentina y temporal de la memoria a corto plazo.
El médico que lo atendió sugirió al matrimonio que esperaran recuperar su memoria en 24 horas. Sin embargo, eso todavía no ha sucedido. Ruth asegura que su esposo en más amigable y sociable que antes.
“Su personalidad también es diferente. Por ejemplo, ya no le gustan las mismas comidas. Pero por suerte su sentido del humor sigue siendo bueno. Y es más amigable y sociable”, añadió.
Porter afirma que no solo olvidó el día que conoció a su esposa, cuando se casaron o nació su hija, sino que también ha perdido todo recuerdo de su educación, de sus conocimientos, por lo que debió de dejar de trabajar como especialista en audición.
“Él no recuerda haberme conocido, casarse, mi embarazo, comprar nuestra primera casa, el nacimiento de nuestra hija o el 11 de septiembre. Es extraño porque yo estoy en una relación antigua y él en una nueva”, dijo Ruth.
Cabe destacar que Porter había empezado a tener convulsiones inducidas por estrés en enero de 2020, luego de perder su trabajo, vender su casa para mudarse con sus padres y sufrir un deslizamiento de disco en la espalda.
“Tuvimos un año realmente traumático en 2019, quizá fue un disparador. Daniel perdió su empleo, por lo que vendimos nuestra casa y la mayoría de nuestras posesiones y nos mudamos a Missouri por una oportunidad de trabajo”, señaló.
No obstante, cuenta que no les pagaron y acabaron varados sin amigos ni familiares.
“Sabía que cuando las personas atraviesan un trauma pueden perder la memoria, pero jamás imaginé que esa pérdida podía borra recuerdos de más de dos décadas”, reflexionó.
Redacción Maduradas con información de El Clarín.
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