«Mi hijo murió tras comer basura del botadero», esa fue la desgarradora frase del padre de un niño de 12 años de edad, quien tras su fallecimiento se convirtió en un símbolo de la pobreza extrema en Venezuela, un país sumergido en una profunda crisis económica sin precedentes y que el chavismo culpa a los Estados Unidos con sus sanciones.
«Pudieron haberlo salvado en el hospital, pero no lo atendieron bien. No nos hicieron caso», lamentó durante una entrevista concedida a BBC Mundo el hombre de 47 años desde su humilde hogar en Las Delicias de Caicara de Maturín, en Monagas.
Se trata del duro testimonio de Rudy Jose Arzolar Olivero, quien desde hace semanas llora desconsoladamente la muerte de uno de sus siete hijos. «Aquí no hay trabajo», explicó el hombre para justificar la precariedad de la situación en la cual se encuentran.
«Al terminar, yo me vine para mi casa y mis hijos se quedaron. Poco después, mi hija vino corriendo y gritando: ‘Papi, creo que Manuel está envenenado porque está tirado en el suelo sin poder moverse'», relató.
De inmediato, el caso de Manuel Arzolar ha conmocionado a toda Venezuela.
POBREZA EXTREMA EN VENEZUELA
El 53,3 % de los venezolanos vive por debajo del umbral de la pobreza extrema, si esta es medida por ingresos, lo que supone 14,7 puntos porcentuales menos con respecto al 2021, según la Encuesta sobre Condiciones de Vida (Encovi) elaborada por la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), la cual fue presentada a finales del 2022.
La encuesta también mostró que el 81,5 % —porcentaje que también incluye los anteriores— se encuentra por debajo del umbral de pobreza, lo que también representa una reducción de 8,5 puntos porcentuales en comparación con 2021.
Redacción Maduradas con información de BBC Mundo y EFE
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