El 1 de mayo de 1994, Ayrton Senna falleció en un choque con su Williams durante el Gran Premio de San Marino de Fórmula 1 en el Autódromo Enzo y Dino Ferrari de Imola, ese fue el final del tricampeón mundial en 1988, 1990 y 1991 que es uno de los mejores pilotos de la historia.
Sobre Senna se sabe que su prioridad fue su profesión, aunque tuvo varias parejas, la primera de ellas fue Adriane Yamin, su «novia secreta», además de esta también pasaron compañeras que sí fueron muy conocidas como Lilian Vasconcellos, con quien se casó en 1981 y se divorció dos años después; la presentadora Xuxa en 1989; y Adriane Galisteu entre 1993 y 1994.
Yamín y Ayrton estuvieron juntos por cuatro años, su historia comenzó cuando ella tenía 15 años y él 24, se llegaron a comprometieron, su historia de amor se mantuvo siempre bajo perfil hasta 2019 cuando Adriane publicó el libro “Minha Garota” o «Mi chica», tras esperar a que sus hijos fueran lo suficientemente mayores como para conocer la historia.
La mujer explicó en una entrevista cómo fue la relación con ese astro del deporte que además era mucho mayor que él, reconoció que no habían problemas entre ellos y que «había una afinidad intuitiva» y ambos querían mantener su vida amorosa en privado.
«Su vida profesional fue aparte de las citas. Yo todavía estaba terminando mi último año de secundaria mientras él obtenía sus primeras victorias en la F1. Estábamos saliendo bajo el estricto control de mis padres debido a mi corta edad. Yo creo que Senna no solo aceptó, sino que también estuvo de acuerdo con eso, quizá porque en su familia, con su hermana, su crianza fue de la misma manera. La intimidad entre nosotros fue conquistada poco a poco, según lo permitía mi edad y madurez. Nuestro noviazgo comenzó cuando yo tenía 15 años y terminó cuando tenía 19«, detalló.
Aunque la pareja tenía planes de casarse en 1989, el piloto decidió «disfrutar de la vida y la fama», recordó la mujer.
La relación entre ellos se había mantenido a lo largo de los años entre viajes por la agenda que llevaba Senna, por esta razón debieron intercambiar muchas cartas para mantenerse comunicados.
«Tengo muchas cartas de Senna. Gracias a Dios en ese momento las llamadas internacionales eran difíciles y costosas, no teníamos tantas tecnologías portátiles, por eso tengo muchas cartas y todas están en mi libro, las imágenes de estas cartas escritas a mano. No llegué a contar el número de cartas, quizá porque también tengo notitas y tarjetitas que venían con las muchas flores que recibí de él. En cuanto a mí, fueron sólo dos y un telegrama, porque nunca supe dónde estaría él cuando la carta fuera entregada, y mucho menos dónde podría enviarla. Lo mismo sucedió con las llamadas telefónicas, tuve que esperar su llamada porque no sabía dónde estaría ni cuándo», recalcó.
En una de estas cartas, Senna le escribió a Yamín: «Hola chica, la luna llena estas últimas noches ha estado siguiéndome, y con ella un recuerdo de ti que es difícil de controlar. He estado pensando mucho en ti y te extraño mucho. Tal vez esta carta ni siquiera llegue antes de mí, pero realmente siento que te extraño mucho. Quiero aprovechar al máximo este verano. A tu lado con todos los juguetes nuevos, lancha rápida/jetski/buceo/paracaídas y cómo no podía faltar el nuevo ‘avioncito’… Todo esto con muchos besos».
Redacción Maduradas con información de Infobae.
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