Robbie Morgan, de 30 años, se casó con Marina, de 29 años, en la iglesia copta ortodoxa de Santa María y San Merkorious, en Rodas, Sydney, el pasado 11 de junio, pero tres semanas después se realizó el funeral de la novia en este mismo lugar.
Clarín.
La pareja fue a Hamilton Island, una de las islas de Whitsunday de Queensland, ara pasar su luna de miel, pero el carrito de golf donde se movilizaban se volcó el 20 de junio.
El carrito era conducido por Robbie, pero su esposa terminó gravemente lesionada, y pese a que los rescatistas intentaron reanimarla no lograron salvarla.
El inspector de la policía de Queensland, Anthony Cowan, informó sobre la muerte de Marina calificándola de trágico accidente y aseguró que no hubo indicios de alcohol o conducción peligrosa.
«Es posible que haya habido algo de inexperiencia en la conducción de ese tipo de vehículos, mientras que al girar rodó sobre su lado y la mujer cayó y sufrió lesiones gravísimas. Fue un trágico accidente con un buggy de golf«, señaló.
El sábado 2 de julio se llevó a cabo el funeral en la iglesia donde se casó la pareja.
La prima de Marina, Miriam, escribió un poema en su honor: «Una hija, una amiga, un miembro de la familia y una esposa. Marina realmente cumplió su mayor objetivo en la vida. Casarse con su amigo del alma, Robbie, y ser una novia, al tiempo que llenaba de orgullo a su familia. La noche antes de su boda, nos acurrucamos juntas y me dijo lo satisfecha que estaba y que la vida no podía ser mejor».
Mientras que su hermano, Mark Hanna, la describió: «Marina era una mujer dulce, joven e independiente que era querida por todos los que la conocían. Era hermosa por dentro y por fuera, le encantaba reír y siempre tenía una visión positiva de la vida».
Redacción Maduradas con información de Clarín.
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