Hana Horká, de 57 años, una cantante antivacunas checa, deseaba volver a participar en actividades culturales, pero en su país son restringidas para ciudadanos vacunados, aunque ella quería evitar la vacuna.
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BBC.
Por este motivo, la artista se contagió voluntariamente de covid-19 acercándose a su hijo Jan Reck y el padre de este, quienes se habían infectado, pero estaban vacunados, la razón: obtener pase sanitario.
El hijo de Hana Horká explicó: «Debería haberse aislado durante una semana porque mi padre y yo dimos positivo. Pero estuvo con nosotros todo el tiempo».
La artista falleció, y dos días antes del triste desenlace, había publicado un mensaje en su cuenta de Facebook, anunciado que portaba el virus, el mismo estaba adornado con emoticones de animales, caras sonrientes y soles.
En ese post, la mujer describió la experiencia con el covid-19 como «colorida» y compartió una lista corta de lo que podría hacer sin tener que vacunarse: «Habrá teatro, sauna, concierto y un viaje urgente al mar».
El pasado domingo, día en que falleció, la cantante dijo que se sentía mejor, se vistió y salió a caminar, pero luego sintió dolores de espalda y fue a su dormitorio para descansar.
«En unos 10 minutos todo había terminado… Se ahogó hasta morir», señaló su hijo.
Sobre este caso, el presidente de la Sociedad de Infectología de Venezuela (SIV), Manuel Enrique Figuera, señaló que Hana Horká es «una víctima mas del terrorismo antivacunas».
Además, el experto señaló: «Ella como otros fue sembrada de ideas absurdas, de temores infundados, de falsas teorías conspiranoicas, de dogmáticos mensajes desequilibrados y llenos de mentiras».
Redacción Maduradas con información de BBC.
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