André Bellorín, quien en su cédula de identidad figura como Andreina, aseguró que la escasez de medicinas en Venezuela podría afectar el proceso de “transformación” que tanto trabajo le costó lograr.
Foto: Salud Como
De igual forma, afirmó que “se le ha hecho imposible” conseguir la testosterona que necesita para mantener los cambios que alcanzó.
“Cada vez se hizo más difícil encontrar la testosterona. Recorría una farmacia tras otra; a veces tenía suerte, otras no”, dijo.
Asimismo, admitió que no cuenta con los recursos económicos para pedir las medicinas Colombia pues el costo es “muy elevado”. Agregó que sus amigos le regalaron unas hormonas inyectables por su cumpleaños.
“Yo no tengo dinero para comprar la hormona en Colombia y que me la manden todos los meses”, señaló.
No obstante, la preocupación de André radica en la feminización de su cuerpo por la interrupción de su tratamiento, el cual no ha podido adquirir desde el 2014.
“Ya no me sale barba en muchas partes de la cara y me estoy poniendo más caderón. Pero lo peor es mi voz, no soportaría que mi voz fuera otra vez la de antes”, contó.
Actualmente André trabaja en una empresa agrícola, pero admite que “no saldría a la calle” si su transformación se revirtiera por completo.
“Si volviera a parecer una mujer, no me atrevería a salir a la calle”, confesó.
Redacción Maduradas con información de Sumarium.