Fuentes confirmaron al diario español ABC, que el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, envió recientemente una delegación de emisarios para corroborar el estado de salud de algunos presos estadounidenses en el centro penitenciario del Helicoide quienes se encuentran privados de libertad desde el año 2017.
El pasado martes 7 de diciembre Roger Carstens, enviado especial para negociaciones de rehenes fue el encargado de verificar el estado de salud de los directivos de la petrolera Citgo arrestados en 2017, a dos mercenarios estadounidenses detenidos en 2020 y a un tercer exsoldado.
La información fue confirmada por el subsecretario de Estado para América Latina, Brian Nichols, quien manifestó que Carstens presuntamente logró hablar con los privados de libertad y se encuentra a la espera de entregar información a sus familiares desde el 10 de diciembre cuando retornó a territorio americano.
«Sí, realizamos una visita consular a ciudadanos y residentes de los Estados Unidos encarcelados indebidamente en Venezuela. El derecho de las visitas consulares es algo que tiene una historia milenaria en la diplomacia y eso fue el motivo de la visita», dijo.
Según otra fuente consultada por ABC, Biden estaría solicitando al régimen de Nicolás Maduro la Liberación de los presos estadounidenses.
«Sigue abogando por la liberación inmediata e incondicional de todos los ciudadanos estadounidenses detenidos injustamente en Venezuela», dijo.
El secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, y el consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, tenían conocimiento del emisarios enviado para constatar el estado de los detenidos luego de que activistas a favor de los derechos humanos denunciaron que en el Helicoide ha habido brotes de coronavirus, que el régimen es incapaz de controlar ni informar.
Varias fuentes conocedoras del viaje de Carstens detallaron que la Administración Biden pactó indirectamente con el régimen la visita a seis directivos de Citgo y a los otros tres estadounidenses detenidos más tarde, en 2020.
Carstens, que lleva en el cargo menos de dos años, temía que los detenidos no supieran quién era, por ello trajo fotos de él mismo con las familias de los detenidos, tomadas en EE.UU. Al parecer, en el Helicoide, Carstens pudo hablar con cierto nivel de intimidad con los detenidos. Las visitas duraron según fuentes oficiales entre 45 y 90 minutos.
Carstens también pudo reunirse con Luke Denman y Airan Berry, dos soldados retirados de EE.UU. que participaron en el fallido intento de derrocar a Maduro desde Colombia en 2020. Carstens también se reunio con Matthew Heath, otro exsoldado norteamericano que fue detenido también en 2020 acusado de terrorismo y tráfico de armas.
Redacción Maduradas con información de ABC