Por lo general, cuando se celebran elecciones presidenciales en países donde el proceso genera gran expectación, periodistas y medios de comunicación suelen anunciar al posible ganador, o a quien suma la mayoría de votos, aún sin finalizar el conteo y adelantando un resultado que podría cambiar.
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Sin embargo, analistas piden estar atentos y señalan que efectos como éstos se conocen como «espejismo». De acuerdo con lo explicado por la BBC, en términos electorales, se trata de «que los resultados que se empiecen a publicar esa noche apunten a la victoria de uno de los candidatos, pero, posteriormente, ya sea en esa misma madrugada o días después, el panorama dé un vuelco».
Según señalan, esto se debe a las particularidades de cada estado respecto al cómo y cuándo es realizado el conteo de los votos. Por ejemplo, en las elecciones de este año millones de estadounidenses adoptaron ejercer el voto por correo, muchos más que en años anteriores.
«El espejismo rojo (…) radica en el hecho de que con votaciones en 50 estados y el Distrito de Columbia (D.C.), tenemos 51 elecciones ocurriendo al mismo tiempo. Cada lugar tiene sus propias normas y eso afecta a la forma en que se procesan los votos y cómo son contabilizados», sostuvo el analista electoral Geoffrey Skelley, del portal de sondeos FiveThirtyEight.
En este sentido, la clave estaría en lo que decida hacer cada territorio. En algunos estados los votos que se realicen en persona son contados antes, y se espera que éstos favorezcan a Trump, pues electores republicanos habrían manifestado preferencia por este método de voto.
Por otro lado, hay estados en los que el voto por correo son los primeros en ser escrutados, y se espera que éstos favorezcan a Biden, igualmente, porque sus votantes manifestaron preferencia por esta vía.
De esta manera, el director ejecutivo del Centro de Investigación e Innovación Electoral, David Becker, sostiene que el espejismo «está basado en la idea de que, de alguna forma, alguien podría decir que va por delante con un pequeño porcentaje de los votos escrutados, lo que es ridículo».
Redacción Maduradas con información de BBC