A pesar de las múltiples limitaciones de extranjeros que desean obtener residencia permanente en Estados Unidos, desde julio de 2016, existe una regla que permite que ciertos indocumentados puedan recibir la Green Card sin ser sancionados por la temida Ley del Castigo.
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De acuerdo con Univisión, el beneficio, conocido como el Perdón 601-A, faculta que indocumentados casados con ciudadanos estadounidenses o residentes legales permanentes puedan obtener la residencia permanente en la nación norteamericana.
«Todos los indocumentados, menos los esposos, hijos menores de 21 años y padres de ciudadanos estadounidenses que entraron legalmente al país, necesitan hacer este trámite en caso de solicitar un ajuste de estado y tener un cupo de visa disponible«, explicó José Guerrero, abogado de inmigración que ejerce en Miami, Florida.
Detalló que el proceso obliga a los solicitantes a salir del país para realizar un trámite en el consulado estadounidense, donde deben solicitar una visa de inmigrante para, luego, volver a la nación. En el caso de indocumentados casados con ciudadanos estadounidenses y que entraron legalmente al país, no es necesario que salgan de la nación, sino que pueden esperar la Green Card dentro de Estados Unidos.
El complejo proceso
Sin embargo, según Nelson Castillo, doctor en la ley de inmigración que ejerce en Los Ángeles, California, el proceso no es tan sencillo como parece y el hecho de salir del territorio estadounidense no sería garantía de que se obtendrá la documentación.
El documento debe ser solicitado ante la Oficina de Ciudadanía y Servicios de inmigración (USCIS), donde se presentarán pruebas de que el solicitante, su cónyuge o sus padres pasarían grandes dificultades si la exención no es concedida.
«Para demostrar sufrimiento extremo o que el cónyuge o los hijos no sufrirán si usted no puede regresar al país, hay que aportar pruebas, evidencias médicas que convenzan al gobierno (…). Son casos difíciles de ganar. Es importante saber que la mayor cantidad de información posible que usted le entregue al gobierno ayudará en su caso«, precisó el experto.
Adicionalmente, no hay garantía alguna de que, por el hecho de que el solicitante salga del país y se presente ante el consultado, pueda reingresar a Estados Unidos. De hecho, Castillo advirtió que, incluso si el Perdón 601-A es aprobado, los extranjeros están sujetos a otras leyes de inmigración que podrían hacerlo no admisible para ingresar a la nación norteamericana.
«Por ejemplo, si ha mentido en otras ocasiones durante otra gestión migratoria, si ha violado múltiples veces la ley de inmigración, si usted tiene muchas entradas ilegales al país, deportaciones, etc.», dijo el especialista y añadió que, si el proceso consular fracasa, les será aplicada la Ley del Castigo.
Vale recordar que la denominada «Ley del Castigo», aprobada por el Congreso en 1996, estipula que, si un extranjero permanece más de 180 días indocumentado en Estados Unidos, será castigado por un período de tres años fuera del país. Y si la permanencia ilegal pasa de 365 días, el castigo se eleva a 10 años.
Costo del Perdón 601-A
Castillo indicó que la gestión del trámite tiene un costo de $630 más $85 por la toma de pruebas biométricas, para dar un total de $715.
«Pero no solo es este costo. Tiene que sumar las peticiones de ajuste, beneficios adicionales que haya solicitado y lo que vaya a cobrarle el abogado que lo representará, sobre todo en el caso que requiera ayuda legal«, añadió.
Así mismo, indicó que, aunque el tiempo oficial de demora de la gestión es de entre 21.5 y 39 meses (de 1.7 a 3.2 años), este tiempo puede verse afectado por el necesario para el resto de los procesos.
«Primero tiene que haber una petición de ajuste de estado (petición de residencia) familiar o por trabajo. Y el tiempo en que el Departamento de Estado avise que ya existe un cupo de visa disponible. En este caso algunas esperas pueden son de seis años o más«, advirtió.
Motivos de inadmisibilidad
Los expertos en leyes advirtieron que existen motivos de inadmisibilidad que pueden afectar la entrada de un extranjero, pese a que tenga aprobado el Perdón 601-A.
Según Univisión, la lista incluye carga pública, una enfermedad que lo convierta en un peligro para otras personas, consumo y tráfico de drogas, haber cometido un delito grave o inmoral, haber pertenecido al partido comunista o nazi, pertenecer a una ganga o grupo criminal, violaciones a la ley de inmigración o estar casado con más de una persona.
También debe prestarse atención a las prioridades de deportación anunciadas por el gobierno en febrero y actualizadas en octubre del año pasado.
Redacción Maduradas con información de Univisión
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