¡Sigue el golpe al bolsillo! Los venezolanos han visto como el reciente aumento salarial, el cual aún no es cobrado, ya se le fue de las manos y no conforme con eso debe seguir gastando más de ello para poder sobrevivir en el país.
En menos de cinco meses del 2016 los taxistas han aplicado tres incrementos en sus tarifas. Una decisión que, a juicio del gremio, busca aplacar los efectos de la inflación que compromete la adquisición y reposición de autopartes para sus vehículos.
Con el último reajuste en puertas, estimulado por el 30 % de incremento del salario, la carrera mínima pasó de 400 a 500 y 700 bolívares, lo que apenas permite al pasajero desplazarse cuatro cuadras en el Área Metropolitana.
La escasez de repuestos, la recesión económica y la inseguridad, argumentan taxistas, se perfilan como grandes problemas que golpean la prestación de un servicio, donde los conductores y pasajeros se temen mutuamente por el clima de violencia que acecha la ciudad.
En Caracas, los municipios Sucre y Libertador tienen las tarifas más caras, según reportan usuarios. La primera recarga del año comenzó a aplicarse en enero y la segunda en marzo, tras el primer aumento del salario oficializado este año, en esa ocasión del 20 %, reseñó El Universal.
Un servicio desde el centro de Caracas hasta el Aeropuerto Internacional de Maiquetía no baja de Bs. 3.500. Si el traslado es desde Terrazas del Ávila, en Sucre, el monto asciende a Bs- 8.500. Aun cuando los voceros de las líneas aseguran entender el impacto económico que ocasionan en la población, enfatizan que en ocasiones terminan subsidiando los costos.
En torno al mototaxi, clientes advierten que el costo varía poco en comparación con los taxis. En la mayoría de las líneas la tarifa es Bs. 500.