Cuba consiguió un asiento en el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, que renovó este martes 13 de octubre 15 de sus puestos en una votación celebrada por la Asamblea General de la organización.
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Varias ONG como Human Rights Watch habían pedido a los países de la ONU que se pronunciaran tanto contra Arabia Saudí como contra China, que sí salió elegida, por considerarlos dos de los gobiernos más abusivos del mundo.
Otros dos Estados cuya candidatura rechazaba también HRW, Rusia y Cuba, lograron su ingreso en este organismo con sede en Ginebra, en el que permanecerán tres años a partir del próximo 1 de enero.
Bolivia, China, Costa de Marfil, Cuba, Francia, Gabón, Malawi, México, Nepal, Pakistán, Rusia, Senegal, Ucrania, Uzbekistán y el Reino Unido son los quince países que, finalmente, entrarán en el órgano.
«Si hubiera habido candidatos adicionales, China, Cuba y Rusia también podrían haber perdido», apuntó Charbonneau, que subrayó que la incorporación de estos países, que según él no se merecen estar en dicha institución, «no evitará que el consejo arroje luz sobre los abusos y defienda a las víctimas».
«De hecho, al estar en el Consejo, estos abusadores estarán directamente en el centro de atención«, agregó.
Solo 72 horas después de que la dictadura en #Cuba hiciera este acto de repudio contra Tania Bruguera y contra Iliana Hernández, este 10 de octubre en San Isidro, La Habana, a esa dictadura le dan nuevamente un asiento en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. pic.twitter.com/5quokItJSO
— Rolando Nápoles (@RNapoles) October 13, 2020
La elección del régimen comunista de Castro como miembro del Consejo de Derechos Humanos @UNHumanRights no sólo es una vergüenza sino una traición a la Declaración Universal de #DDHH y los valores universales.
Una dictadura NO PUEDE estar ahí!@mbachelet @antonioguterres pic.twitter.com/vr0Wu9F8HL— Félix Llerena Cuba (@FelixLlerenaCUB) October 13, 2020
EFE
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