Los cadáveres de Martha Liliana Aristizabal, de 37 años de edad, y Dorancelys del Valle Tocuyo Martínez (29) fueron hallados con múltiples disparos detrás de una casa en El Callao, en el sur del estado Bolívar, luego de que ambas participaran en unas protestas registradas en la región y que fueron reprimidas por los organismos de seguridad controlados por el régimen de Nicolás Maduro.
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Familiares de Dorancelys Tocuyo piden que el alcalde de El Callao, Alberto Hurtado, sea investigado por su asesinato e interpondrán la denuncia ante el Ministerio Público, de acuerdo a la información reseñada en el portal web del diario Correo del Caroní.
“La investigación deberían hacerla autoridades a ver qué tan culpable es el alcalde, porque no puede ser casualidad que una vez que ella le haya dicho todas sus verdades aparezca muerta y torturada. La denuncia se va a hacer en Fiscalía, estamos esperando a ver qué nos dice el abogado”, manifestó Luis Tocuyo, hermano de la víctima.
La joven era natural de Cumaná, estado Sucre, pero se trasladó hacia la ciudad de San Félix, luego migró a la población de El Callao, donde trabajó la minería y en un establecimiento de nombre «El Bar de Benavides», precisó la ONG FundaREDES.
El organismo detalló, que el motivo de las manifestaciones realizadas por habitantes de la ciudad, se debió a que en los comercios se negaban a recibir el billete de 50.000 bolívares. «Dorancelys alzó la voz en representación de los habitantes y recalcó que si le sucedía algo sería responsabilidad del alcalde», de quien precisaron es militante del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), del régimen chavista.
Dorialcely Tocuyo de 29 años de edad era natural de Cumaná, estado Sucre, pero se trasladó hacia la ciudad de San Félix, luego migró a la población de El Callao donde trabajó la minería y en un establecimiento comercial de nombre "el bar de Benavides".
— FundaREDES (@FundaREDES_) June 3, 2021
Redacción Maduradas con información de Correo del Caroní
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